lunes, 18 de septiembre de 2017

10 DE SEPTIEMBRE

En medio de los pasos inciertos que trae el destino, allí estabas tú, cual peregrino dudoso, en medio de mi camino, con preguntas imprecisas, te miré y sentí una conexión de aquellas que no suelen ser reales, me miraste y como si nos conociéramos de otra vida, me acompañaste en la calzada, cambiaste mi destino y llegamos al café de la luz... aquella luz que fue testigo por un momento de la mas repentina ilusión, de esa que surge de la nada y se alimenta con la fugaz presencia de las almas mágicas...
fue un destello de pasión, que terminó en tu habitación, en aquella que desde el 10 de septiembre, guardó tus secretos, aquella que consolidó el temor con la poca voluntad del cuerpo... aquella que fue cómplice del triunfo del desasosiego...
tú, tan titubeante e impredecible, de nuevo en mi camino, esta vez para aluzar esa parte de mi que es mi flaqueza, mi corazón... 
tan caballero y penitente a la vez, en medio de un romance efímero, vencimos el temor, pero esta vez, terminó en dudas, se apagó la pasión y estuvimos presentes en la despedida de nuestro perecedero encuentro, aquel que un beso quiso construir y nuestros cuerpos decidieron terminar...
no se que pasará, si nuestros pasos se vuelvan a a encontrar o si el recuerdo nos condene en una ausente eternidad...